No es fácil comprar pollo en Buenos Aires, generalmente les dan alimento balanceado, les inyectan hormonas y a veces agua- nada bueno para nuestro cuerpo. Es por eso que siempre intentamos comer pollos orgánicos, mi abuelo generalmente nos trae del campo unos riquísimos o compramos los que están alimentados en granjas solo por maíz en un lugar que descubrimos recientemente.
Mi tía Tutti nos regalo un libro de recetas exclusivamente de pollo, así que hace poco compramos unas pechugas para probarlo. Lo raro fue que todavía no habíamos pensado que, pero confiábamos en que iba a ser algo rico.
Después de ver varias recetas decidimos hacer las brochetas, cambiamos un poco la receta agregándoles cebolla y morrón y usando tomates grandes en vez de cherrys.
Ingreientes:
Pechugas de pollo, deshuesadas y sin piel
3 cdas de tomate concentrado
2 cdas de miel
2 cdas de salsa Worcestershire, o salsa inglesa
1 cda de romero fresco picado
2 tomates, sin semillas
2 cebollas
1 morrón
Preparacion:
Cortar el pollo en dados de 2.5 cm. En un bol, mezcle el tomate concentrado con la miel, la salsa Worcestershire y el romero. Eche el aderezo sobre el pollo y remueva para que se unte bien.
Dejar las las brochetas de madera 30 minutos en remojo, para que no se quemen durante la cocción Precalentar el horno a temperatura media.
Cortar la cebolla, el morrón y el tomate en cuadraditos de 2 cm de lado. Ensartelos en alternancia con los trozos de pollo en las brochetas e insertelas en la parrilla del horno.
Úntelas con el aderezo sobrante y luego aselas de 8 a 10 minutos, dándoles la vuelta, hasta que el pollo este hecho. En este caso lo acompañamos con arroz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario